(A Pedro Lemebel)
Si yo fuera joven, fina y bella
seguramente sería una estrella,
una artista de esas de la tele,
de esas que sí son de verdad mujeres
como la Tocco o la Bolocco.
Mírame a mí, parezco un mamarracho
y con este cristiano sin trabajo.
Ay, qué vida entretenida,
colorida, distinguida,
siempre halagada por ser tan famosa
y recibiendo montones de rosas.
Otro gallo cantaría,
no sería cocinera,
no sería costurera,
ni tampoco sería lavandera.
¿Te imaginái conocer al Luis Miguel,
abrazar al mexicano Juan Gabriel?
Soñar, soñar, soñar no cuesta nada,
llego a temblar de puro alborotada.
como la Tocco o la Bolocco.
Mírame a mí, parezco un mamarracho
y con este picante sin trabajo.
Ay, qué vida entretenida,
colorida, distinguida,
siempre halagada por ser tan famosa
y recibiendo montones de rosas.
Otro gallo cantaría,
no sería cocinera,
no sería costurera,
ni tampoco sería lavandera.
Güeno, chaíto, me duele la cabeza,
siempre me pasa, no es ninguna sorpresa.
Hasta mañana, me voy por este lado,
en esta feria fresquito está el pescado
como la Tocco o la Bolocco.
Mírame a mí, parezco un mamarracho
y con este atorrante sin trabajo.
Ay, qué vida entretenida,
colorida, distinguida,
siempre halagada por ser tan famosa
y recibiendo montones de rosas.
Otro gallo cantaría,
no sería cocinera,
no sería costurera,
ni tampoco sería lavandera.