Cruzo montes, cruzo ríos,
cruzo los puentes pensando,
las carreteras cruzando,
me separaron de ti.
Ya tengo el alma cansada
de preguntar sin respuesta
por qué la vida te aleja
si un día te conocí
y ahora pregunto por ti
y no encuentro respuesta.
Cuántas noches, cuántos días,
cuántas mañanas de trino,
como juguete sin niño
el amor nos encontró.
En la casa iluminada
por la luz de tu mirada
tu figura tan amada
la perdí en un porvenir
que me separó de ti,
de mi casa iluminada.
De pálidos sentimientos
se alimenta el corazón
porque donde hubo calor
duerme la noche y el frío.
Esta vida de retazos
se la regalo a cualquiera.
Se confunde mi bandera
con un pasado feliz
y este presente festín
se lo regalo a cualquiera.
¿Dónde se esconde la mano,
la que desvió mi camino,
la que torció mi destino,
la que me trajo hasta aquí?
Camino en tierras ajenas
convertida en una extraña
y entre dibujos de araña
se enreda lo que perdí.
Nunca seré lo que fui
convertida en una extraña.